J4 – Mambo FC vs Remeros FC

Remeros nunca le perdió la cara al partido y desafió la lógica logrando un empate con dos goles en el último minuto, ante un Mambo que llego a ir ganando por cuatro goles de diferencia en el marcador.

Bonito duelo el que nos ofrecieron Mambo y Remeros en la jornada 4, donde los primeros que partían como favoritos rápidamente iban a empezar el choque marcando las distancias con sus rivales, con un juego muy claro: presión al contrario y toques rápidos para llegar al área rival. Lo que llevaría a recoger sus primeros frutos en el encuentro, primero en el minuto tres con una gran acción individual de Juan Carlos Sanchez que tiró un bonito caño y colocó sutilmente el balón en el fondo de las mallas con un disparo desde fuera del área. Y acto seguido Mambo volvería a marcar en un córner que remataba de nuevo Juan Carlos pero que Román Ferreras terminaba desviando y metiendo el 2-0 en apenas cinco minutos de juego. Se ponía de cara el partido para Mambo y Remeros no terminaba de dar con la tecla de su juego. Pero el balón parado iba a ser su primera gran oportunidad para recortar distancias y vaya que si lo fue, ya que Enrique Lozano marcaría el primero de los Remeros con un disparo raso desde la frontal del área, en el que Francisco Plaza no pudo hacer mucho más ya que tenía demasiados jugadores obstaculizando su visión. Espoleados por ese primer gol Remeros subió líneas y busco apretar a Mambo en su propio campo y parecía funcionar, hasta que una precisa contra iniciada por un balón largo del portero Francisco Plaza dejaba a Alejandro Padilla solo para colocar el 3-1 a favor de Mambo y mantener la distancia en el marcador hasta el final de la primera parte.

Todo hacía presagiar que la segunda parte sería un monólogo de Mambo, ya que a los dos minutos de empezar Juan Carlos Sanchez ponía el 4-1 con un disparo raso, bien colocado a la cepa del poste derecho del arco de Remeros. Mambo no quería dar tregua y seguía creando peligro y tuvo de nuevo la oportunidad de marcar con una buena jugada donde Alejandro Padilla filtraba un pase perfecto a Iñigo Laucirica que decidía dar de nuevo el pase de la muerte a su compañero desmarcado y este no desperdiciar la oportunidad de marcar a placer, pero que un Xurxo Rodríguez se encargaría de desbaratar en boca de gol golpeando el esférico con la mano. Penalti a favor de Mambo y tarjeta amarilla rigurosa. Iñigo Laucirica esta vez sí, iba a ser él quién estableciera el 5-1 en el resultado asestando un duro golpe a Remeros.

Lo que parecía sentenciado iba a dar cabida a una remontada épica. Remeros se fue con todo al ataque y empezó a asediar sin tregua alguna la portería de Francisco Plaza que salvó con dos buenas intervenciones el gol que permitía soñar al equipo visitante. Como se suele decir a la tercera va la vencida y en una gran acción individual de Iván Reparaz tirando dos cañitos lograba llegar a portería rival y definir a un lado del portero de Mambo y poner el 5-2. Mambo no se vio afectado e intentó subir de nuevo una marcha más en el partido, pero Iván Reparaz se empeñó en dinamitar el encuentro y recortar distancias marcando a placer tras un gran pase de Roberto Rodríguez el 5-3. El nerviosismo se apoderaba de Mambo y empezaban a achicar balones e intentar salir a la contra con balones largos ,pero la dupla en defensa de Pedro y Enrique estaba secando las acometidas rivales. Quedando dos minutos para finalizar el encuentro, el dominio de Remeros era total y en un córner de nuevo a balón parado Pedro Pereiro cabeceaba un buen centro y quitaba las telarañas de la escuadra izquierda de la portería defendida por Mambo, 5-4 y todo hacía indicar que Remeros se quedaría a las puertas de remontar. Pero por algo dicen que el fútbol es el deporte en el que todo puede pasar y vaya que si pasó. Carlos Duarte aprovechó la confusión en la defensa de Mambo para rematar un mal despeje que en primera instancia el portero logró parar, pero en el que la fortuna sonrió a Remeros y le volvió a caer el rechace a Carlos Duarte para marcar a placer el 5-5 y sellar una remontada in extremis.

Empate que sabe a victoria y que permite a los Remeros estrenar su casillero de puntos. Y empate que sabe a derrota para un Mambo que tenía la oportunidad de situarse cerca del líder.