J6 – Mambo FC vs Porrothinaikos

El conjunto local que se puso en ventaja hasta en tres ocasiones acabó viendo como Porrothinaikos le remontada y dando gracias al tanto in extremis de Iñigo Laucirica que salvaba un punto para los locales.

Valdeyeros acogió un enfrentamiento entre dos conjuntos con realidades similares en la sexta jornada de la Fútbol Emotion F7 League. Los protagonistas del enfrentamiento fueron Mambo FC y Porrothinaikos, ambos equipos se encontraban en la parte alta de la clasificación del Grupo Diario Mirasierra, por lo que el buen juego estaba garantizado. En primer lugar, Mambo FC ha sumado 10 puntos en las cinco fechas anteriores, lo que le lleva a estar situados en la sexta posición del grupo. Por otro lado, Porrothinaikos se encuentra en cuarto lugar con diez puntos por encima de los locales. Por lo tanto, el resultado de este duelo puede que sea determinante en las aspiraciones finales de cada escuadra, puesto que una victoria local le haría mirar más hacia la parte noble que hacia abajo y los tres puntos para los visitantes servirían como aval para estar entre los mejores del grupo.

El partido dio comienzo con una versión muy convincente de Mambo FC en el plano ofensivo. Los amarillos salieron al partido convencidos de sus efectivos en la parte de arriba, algo que se pudo ver en los primeros compases de juego, concretamente personificado en Juan Carlos Sánchez. El jugador local dispuso de dos ocasiones de gol: la primera fue un contragolpe que terminó con un disparo estrellado en el poste izquierdo y la segunda oportunidad la resolvió con una volea desde fuera del área que cogió dirección directa al travesaño de la meta de Juan Soliveres. Sin embargo, Porrothinaikos fue capaz de convertir sus ocasiones, esta vez mediante un golpeo de media distancia que realizó Marcos García a los 10 minutos de juego. Aun así, Mambo FC se repuso del golpe en forma de gol visitante e igualó la contienda con un tanto de Román Ferreras. El gol del empate llegó cuatro minutos después tras una buena acción individual de Guido Demarco que, después de zafarse de su defensor, colocó un centro atrás para que el ariete amarillo pusiese el 1-1.

Se llegó al entretiempo con empate a uno tras una primera parte en la que reinaron las ocasiones y el fútbol ofensivo. Ningún equipo se había guardado nada, ambos mostraron sus armas y su mentalidad ofensiva. Por ello, la segunda parte iba a ser más inesperada que una montaña rusa. A los tres minutos, Juan Carlos Sánchez fue el más listo de la clase ya que aprovechó un pase atrás de la zaga rival y, en el balón dividido con el meta visitante, logró encarar la portería para colocar el 2-1 favorable a Mambo FC. La alegría iba por barrios, nada más lejos de la realidad. A los tres minutos del gol amarillo, Porrothinaikos se repuso de la mejor manera posible con el 2-2. El tanto del empate a la media hora de juego llegó tras un centrochut de Martín Escuder que encontró a Javier Elena en el segundo palo, que remató mediante una volea impecable de zurda.

El partido estaba descontrolado, tanto que se estaba viviendo un carrusel de goles. Mambo FC volvió a enganchar un croché, obra de Román Ferreras, el dandy del partido. El 3-2 llegó en el 37’ de juego a través de un contragolpe muy simple pero efectivo. Miguel García lanzó este ataque con un pase al hueco medido al que llegó el propio Román para definir de zurda con mimo. Pero la mala fortuna se adueñó de los locales prácticamente al minuto con un gol en propia meta de Juan Carlos Sánchez. El 3-3 se produjo en banda derecha tras un centro visitante en el que Juan Carlos colocó el pie para despejar, pero finalmente el esférico se introdujo en la meta de Francisco Plaza.

En el tramo final la locura se iba a disparar todavía más. Porrothinaikos fue capaz de darle la vuelta al resultado en apenas cinco minutos. El 3-4 fue obra del crack del partido, Marcos García, después de salir desbocado al contraataque y finalizar a una esquina. Los visitantes trataban de aguantar un resultado que le daba tres puntos vitales para estar entre los mejores del grupo, pero Íñigo Laucirica iba a ser el encargado de boicotear la victoria visitante. A falta de tres minutos para el final, el ‘8’ anotó uno de los goles de la jornada, además de significar el definitivo 4-4, con un golpeo prácticamente desde el medio del campo que se coló por la escuadra.