Jack D. Alves vs Rondo Cluv

El combinado rosa sumó su primer triunfo en la Futbol Emotion MF7 Cup y deja a los azzurros con el casillero vacío. La eficacia goleadora de los locales fue determinante en el devenir del choque. Jaime Cervantes y Álvaro Rijk destacaron con un doblete por cabeza.

Jack D. Alves y Rondo Cluv se enfrentaban en un duelo de necesitados perteneciente al grupo 10 de la Futbol Emotion MF7 Cup. Ambos conjuntos requerían la victoria como el comer, puesto que cayeron derrotados en el primer compromiso copero. La igualdad entre ellos y el excesivo miedo a perder condicionaron unos primeros minutos en los que no pasó gran cosa. Se produjeron muchas imprecisiones que nos alejaron de la salsa de los goles hasta el minuto 11, cuando Jaime Cervantes adelantó al equipo rosado, batiendo por debajo al guardameta visitante desde dentro del área tras una asistencia de Pablo Garrido.

Pero una vez abierta la lata para los locales, el equipo visitante también se animó y Jaime García-Vaquero se sacó de la manga un zapatazo lejano que se coló por el lado izquierdo de la guarida de Carlos Rijk. Con el empate ambos calibraron sus miras con intentos desde fuera del área que también sirvieron a sus porteros para coger confianza. Con la igualdad por bandera llegó uno de los puntos de inflexión cuando a seis minutos para el final del primer tiempo, el árbitro indicó el punto fatídico a favor de Jack D. Alves y Álvaro Rijk asumió la responsabilidad, mandando la pelota a guardar con un tiro ajustado a la izquierda. A Rondo Cluv le cayó un jarro de agua fría a tan poco tiempo del descanso, pero la situación empeoraría cuando Jaime Cervantes materializó su doblete y con ello el 3-1 tras un magnifico recorte para sacar posteriormente un remate colocado a la cepa izquierda.

El equipo negriazul quería conjurarse para darle la vuelta al partido en el segundo asalto, pero querer no fue sinónimo de poder y Pablo Garrido dejó el encuentro prácticamente sentenciado con el cuarto tanto de la tarde aprovechando un robo de balón en el centro del campo y resolviendo con la zurda al palo largo de la meta visitante. La goleada pudo ser mayor si Álvaro Rijk hubiera convertido un mano a mano clarísimo, pero el cancerbero visitante mantuvo un mínimo hilo de esperanza, que se vio ratificado con la llegada del 4-2, en una gran remate de Jon Arias, que recibió un centro desde la esquina y colocó su pie diestro para mandar la pelota al lado derecho de la jaula rosada.

No sabremos qué hubiera pasado si no hubieran encajado más goles de aquí al final, pero la realidad es que Álvaro Rijk se redimió tras su fallo anterior un minuto después, con un bonito remate de volea que se coló por debajo del portero. En los últimos coletazos del choque, Jack D. Alves bajó el ritmo y los negriazules gozaron de una serie de ocasiones que pudieron servir para maquillar algo más el tanteador, pero Carlos Rijk bloqueó todos sus intentos de larga distancia.