J11 – Host Partners vs Tates FC

Hasta 2-0 se llegaron a colocar los locales con un estilo de fútbol directo que puso en serios apuros a su rival. Solo a partir de finales de la primera mitad, Tates FC pudo imponer más su juego con un ritmo alto de circulación remontando en el segundo periodo los dos tantos en contra para rescatar al menos un punto.

Plato fuerte el que iba a acoger Santa Ana en la jornada sabatina de la tarde. Se enfrentaban Host Partners contra Tates FC, dos de los mejores equipos de la Fútbol Emotion MF7 League de los sábados. Tercero contra primero del Grupo 2 en un duelo que no defraudó.

Host Partners había estudiado a sus rivales y sorprendió saltando al césped planteando una guerra de guerrillas en cada centímetro del verde. Su bloque bajo y su intensidad en las disputas desorientaba a los visitantes, incómodos tanto en la defensa de los envíos largos como en la construcción de las jugadas. A los cinco minutos, los blancos ya mandaban en el marcador. Marcos González cazaba el enésimo duelo aéreo y no se lo pensaba a la hora de disparar. Su remate, con cierta fortuna por el toque en un defensor, iba a parar a la red.

El 1-0 no suponía un punto de inflexión para los de la zamarra celeste. El eje Villafaina, Cascón, Ramírez, el ABC de sus ataques, no aparecía al estar siempre marcados. Las pérdidas y malas entregas se acumulaban ya por decenas. Fruto de su desesperación, exteriorizaban sus sentimientos. “No estamos jugando a nada”, exclamaba José Vera. La pesadilla iba a resultar aún peor, pues Host Partners firmaba al 2-0, obra de Gonzalo Moreno. El central, un valladar ya de por sí, demostraba su fortaleza en el juego aéreo cabeceando un saque de banda servido por Marcos González.

Cumplido el cuarto de hora, el líder del Grupo 2 se reponía definitivamente del golpe y ya no cederían una nueva ocasión hasta la segunda mitad. Su rival se defendía como podía, incapaz de salir ya de su campo. El palo se toparía con sus ganas de remontar hasta en dos ocasiones. Primero con un disparo desde la izquierda de Cascón y luego con otro de Ramírez cuando todos esperaban el centro. Pablo Javier Rodríguez detenía al propio Ramírez un remate paralelo a media altura en una de las pocas oportunidades que podían transitar en los primeros 25 minutos.

El dominio iba a más en la segunda parte. A través de un ritmo infernal de balón y con un Villafaina mucho más liberado ahora, parecía cuestión de tiempo que llegara un gol. No venía uno sino dos entre el 30’ y el 31’. Andrés Pino conseguía hacer caer el muro con un disparo imposible para Rodríguez. Henchidos de confianza, encontraban a Jesús Ramírez, que no había parado de desmarcarse desde el comienzo del partido para igualar en el mano a mano.

Cuando ya todo parecía perdido para Host Partners, sus efectivos practicaban un ejercicio de resistencia del que ya no era capaz de encontrar soluciones Tates. No por casualidad son el 3º equipo menos goleado de la Liga. No pasaba esta nueva disposición solo por la defensa, pues subían líneas y comenzaban a acumular más llegadas, especialmente desde el balón parado. Ganaban en confianza de tal forma que volvían a anular en el plano ofensivo a un frustrado ya cuadro visitante que con el paso de los minutos se tuvo que conformar con el empate.