F2-J3 Madriles vs Nottingham Miedo

El guardameta Ignacio León le da la victoria al conjunto granate con un golazo desde su portería en los últimos minutos de partido

El partido no prometía demasiado en los primeros minutos de juego. El ritmo era lento y las ocasiones de gol brillaban por su ausencia. Pero todo cambió en el último tramo de la primera mitad. Y es que a partir del minuto quince, los goles y las jugadas peligrosas fueron constantes.

Todo se inició con Martín d´Huicque. El futbolista argentino se sacó de la manga un zurriagazo impresionante que golpeó en el larguero y posteriormente pegó en la espalda de Daniel Martins. El balón terminó dentro y Nottingham Miedo se ponía por detrás en el marcador en una jugada muy desafortunada. Pero la reacción de los visitantes no tardó en llegar. Cuatro minutos después, Juan Medina aprovechó un rechace en el área pequeña para marcar el empate de forma plácida tras una buena parada de Ignacio León en una jugada anterior.

El encuentro fue una locura en la parte final. Un minuto después del empate de los blancos, Javier Velduque hizo que Madriles volviera a estar por delante en el electrónico con un gran golpeo lejano inapelable para Daniel. No obstante, cuando los rojillos todavía estaban casi celebrando el gol, apareció de nuevo Juan Medina con un gran remate de cabeza en el segundo palo que se coló en el fondo de la red. Una gran jugada que estuvo especialmente mal defendida por Madriles, ya que Juan estaba totalmente solo y remató sin ninguna oposición. Aún así, el delantero del Nottingham estaba siendo completamente determinante para el equipo. Y así se puso fin a la primera parte. Con un final totalmente loco. Con tres goles en tres minutos después de un inicio de choque falto de ritmo.

Quedaba por jugarse la segunda parte, y con ello ver si ese ritmo vertiginoso del último tramo del primer tiempo tenía continuidad o no. Y continuidad la verdad es que no tuvo. Otro inicio plano y espeso en el segundo tiempo. Dos equipos muy conservadores y con pocas llegadas peligrosas en las áreas. Sin embargo, el choque volvió a entrar en locura en la recta final. El guion fue exactamente el mismo al de la primera.

Ninguno quiso arriesgar hasta el final. Y ahí apareció la calidad de Matías Ramírez. Fue un quebradero de cabeza permanente para la zaga del cuadro blanco. Su envergadura y su potencia estaba ocasionando muchos problemas en la zaga rival. Aunque primero apareció Daniel Celada. Lo hizo con un remate con la derecha centrado. No muy difícil de parar ‘a priori’. Pero sí lo fue para Ignacio León. El guardameta intentó blocar el balón y se le acabó escurriendo e introduciéndose dentro de la portería. Un error del que luego se redimiría de una forma maravillosa. Este gol ponía contra las cuerdas a Madriles. Pero ahí estaba el gran Matías Ramírez para lucir su calidad. Primero avisó con un disparo repleto de potencia que casi rompe el larguero, y después repitió prácticamente el mismo disparo. Éste sí que entró. Y por la escuadra. Un chut impecable ante el que nada pudo hacer Daniel Martins.

El partido parecía que iba a terminar en empate. Los dos equipos se replegaron y arriesgaban muy poco. Pero no sabíamos lo que estábamos a punto de presenciar. Una de esas situaciones inusuales en los encuentros de fútbol. El propio portero Ignacio León sacó de puerta con mucha fuerza. Aparentemente era un saque hacia su delantero, pero Daniel Martins estaba muy adelantado y el balón sorprendentemente le sobrepasó. El balón estaba dentro. Era gol. Y la euforia se apoderó de Ignacio y de todo su equipo. Madriles se había llevado tres puntos muy importantes a falta de dos minutos para el final. Fue el colofón perfecto para un partido que tuvo muchos momentos insulsos, y también muchos momentos apasionantes.