J7 – Inter de Brugal vs La Cannabinha

La Cannabinha, que logró igualar el marcador mediada la primera mitad, acabó goleado ante el mayor acierto de su rival.

Y es que los visitantes salieron mucho más intensos en los primeros compases y dispusieron de hasta tres ocasiones para haberse adelantado en el marcador, pero los intentos de David López y Rodrigo Patiño encontraron sendas respuestas del guardameta Diego Calvo, entre medias, Adrián Garvin también pudo inaugurar el casillero de su equipo, pero su remate acrobático desde el punto de penalti se marchó por encima del travesaño. A medida que avanzaron los minutos, La Cannabinha comenzó a tener la sensación de que solo le faltó el gol para empezar a tener el partido controlado, pero fue Inter de Brugal quien encontró ese premio cuando un disparo muy lejano de Javier Mosteiro se envenenó y acabó alojado en el fondo de la portería.

A pesar del jarro de agua fría, La Cannabinha siguió llevando el peso del partido y apareciendo con mucho peligro por el área rival, de las botas de David López salió un excelente centro desde la derecha que cabeceó fuera Carlos Calvo. Finalmente, en la siguiente acción, se hizo justicia cuando el propio Calvo condujo por el callejón del ocho para asistir a Oscar Fernández que definió por bajo con un disparo cruzado que restableció las tablas en el marcador. Sin embargo, lejos de venirse abajo, Inter de Brugal fue poco a poco sacudiéndose el dominio de su rival y pudo volver a ponerse por delante, primero, con un cabezazo de Martin Gilligan adelantándose al portero en su salida, que se marchó ligeramente desviado y con un disparo de Pablo Aisa que se fue rozando el palo.

Habían conseguido los locales cambiar la dinámica del juego y a medida que se acercaba el final del primer acto, ya se erigían en dominadores del choque. Sin embargo, La Cannabinha no renunció al ataque y pudieron cambiar el sino del partido con una contra que salvó Diego Calvo en el mano a mano. Justo en la siguiente acción, Santiago Zorrilla hizo su presentación en el partido con un extraordinario tanto que él mismo fabricó en el inicio partiendo desde campo propio para plantarse delante del portero tras dejar atrás a dos defensores y definir con clase para enviar el cuero hasta el fondo de las mallas.

Un gol que, por su importancia, comenzó a allanar el camino de su equipo al que aún se le puso todo más de cara cuando a un minuto del descanso, otra gran acción individual, en este caso de Pablo Aisa, acabó con un disparo seco desde la frontal que estableció el 3-1 con el que se llegó hasta el final de los primeros veinticinco minutos.  En el arranque de la reanudación, en nada cambió la decoración y los visitantes vieron como de dominar en el inicio pasaron a tenerlo imposible cuando en apenas tres minutos, Inter De Brugal dejó sentenciado el duelo con un tanto de Jaime Quintero en la finalización de un contraataque que supuso el 4-1 y otro de Pablo Aisa que, tras rebotar en un rival, acabó dibujando una parábola perfecta, imposible para el portero, que significó el 5-1.

Un tanteador demasiado abultado para los méritos de unos y otros a lo largo del encuentro, aunque Inter de Brugal tuvo todo el acierto que le faltó a la Cannabinha, que ni siquiera con un marcador tan adverso dejó de buscar la portería, ahora defendida por Enrique Bravo, el cual respondió con una gran intervención ante un disparo desde fuera del área con el que se pudo haber estrechado el luminoso. En el último tramo, los locales, no solo no dieron lugar a ningún sobresalto sino que estiraron el marcador hasta el 7-1. El sexto lo hizo Santiago Zorrilla, completando con un doblete su extraordinario partido, mientras que cerró la cuenta Martin Gilligan culminando una contra. Con el tiempo ya cumplido, David López hizo el 7-2 con el que se llegó al silbido final.